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miércoles, septiembre 28, 2005

La mannana despues del diluvio universal

Guarde silencio. Decidi dejar a un lado la melancolia y los trajes de princesa. Pero 26 annos son muchos, aunque no lo parezcan. 26 annos llevando un traje al final se te acaba pegando al cuerpo y no sabes muy bien cual es la realidad desnuda. Asi que hoy escribo, como una carta, con un Querido seguido de dos puntos, como deben ser las cartas. Ahora que ha dejado de llover pero mis calcetines siguen mojados.
No era dificil vivir, en el fondo estaba equivocada, pero ayer V. me dijo "you look happy" y tuve que responder por primera vez que si, que estaba feliz, que todo marchaba bien, que tenia una casa azul y direccion postal y lindos companneros de casa y que papa me habia dicho "mastica bien" al despedirse, cuando me llamo por telefono, y que sentia a toda la gente a la que quiero "very close to me" y que ya no me daba miedo la bici y que tenia suficiente dinero para no mirar 10 veces un billete antes de desprenderme de el y que ya podia empezar a tomar el te, mi propio te, no el de sobrecitos sino el que huele a te y tienes que hundir los dedos para sentir la cantidad exacta y que ya habia vuelto a escribir y que ya habia encontrado mas postales en blanco para ti y que si, que por primera vez podia decir que estaba feliz.
Creo que fue una hora despues cuando me dijeron que no era lo bastante rapida y que tenia que hacer esfuerzos por sonreir a los clientes, que seguro que en otro lugar tendria mucha suerte y estaria muy bien, pero no alli, que no era parte del "strongest team" que necesitaban y me hubiera gustado que se equivocaran y patalear y maldecir mi triste suerte pero solo llore, como lloro al cagar, inconteniblemente y sin tristeza, solo porque ayuda a desprenderse.
Esta mannana doble el uniforme, lo guarde en su bolsa y espere a que dejara de llover para salir de casa.

lunes, septiembre 19, 2005

Ruptura

La pequenna Charlotte se rompio entre mis manos. Justo un dia despues de que le dijera que me iba a ir, que me daba pena pero que no podia vivir tan lejos. Era verdad que me daba pena, podria haber sido mentira pero esta vez era verdad, echare de menos el bosque, y poder ver la luna desde la cama y sentir mi cuerpo sin aristas, iluminado tan solo por la noche, echare de menos los dos gatos junto a la chimenea, las peliculas mientras ella prepara lentamente su alimento a base de verduras y semillas, cocinado como construyen los pajaros sus nidos, extrannare la bici como una obligacion para poder llegar y sobre todo echare de menos decir "lo siento, es que vivo muy lejos" ante cualquier invitacion a una pinta de Guinness.

Me llamo desde la cama y estaba temblando y tenia frio y me preguntaba que estaba mal, por que le ocurria todo aquello. "Algo terrible me ocurre" le dijo por tu telefono a su acupuntor "por favor, llamame". Le sujete la cabeza, le puse la mano sobre el pecho, le deje una ramita de menta junto a la almohada y me quede con ella. Cuando por fin se tranquilizo y se durmio me fui al jardin. Si, me va a dar mucha pena. Es una suerte que no sea mas barato, o no tener direccion postal. Creo que podria quedarme aqui, siempre he sentido una extranna debilidad por los neuroticos.

sábado, septiembre 03, 2005

The sound of silence

Ya se han marchado todos. Se han ido poco a poco los fantasmas, las monjas, los doctores, chamanes, las comadronas, los catadores de vino, las estrellas de Hollydood, los perros y los gatos, la familia politica, los novios, los amantes, los que siembran belladonas en los desiertos de las ciudades, los poetas o los que creyeron serlo, los chantajistas, las mujeres con sombrero, los fumadores de opio y de tabaco, los marineros, las princesas, los delincuentes, los ganadores de trofeos, la presidenta de la comunidad de vecinos, los que solian rezar a un Unico Dios Verdadero, los fabricantes de papel con el que se fabrican los periodicos, los peluqueros, las floristas, los funcionarios grises y los blancos, los que fueron sonnadores cuando todavia eran jovenes y los jovenes que tenian miedo. Se han ido formando una gran procesion como en un funeral por el descanso de las almas inocentes, las que murieron con sus zapatos rojos al borde de la playa. Quien sabe si siguen todos juntos como buscando algo o ya regreso cada uno a su casa para llegar a la hora de la cena.

viernes, septiembre 02, 2005

Uni-formes

Sin anillos. Sin pendientes. Sin colgantes (la mano de plata, la gondola de oro). Sin perfume. Sin ninguna senna de indentidad. Tan solo el uniforme, repetido como en un par de espejos frente a frente. El primer uniforme que no me pongo solo para carnaval, porque en carnaval si, me gustaba usar uniformes en ese borde en el que no eran ni verdad ni totalmente falsos.

Detras de la barra, tan solo en medio cuerpo, atenta a los uniformes de los del otro lado, los doctores, psiquiatras, las rayas azulas de las student nurse, todos los uniformes llevan descuento especial, cortesia de la casa. Si llevan tubos insertos en la piel, o heridas o vendajes, o son ancianos o estan perdidos tengo que cobrarles el te como si no fuera necesario.

Toco los uniformes iguales a mi misma, ya no acaricio espaldas tan solo en carnaval, cuando podia tocar bordes, ahora las acaricio para descubrir la curva de un cuerpo solido y distinto. Debajo del uniforme cada cuerpo se empenna en seguir siendo unico.